MIÉRCOLES AÚN MÁS GLORIOSO

 

¿Qué tal princesas? Yo no puedo estar más contenta. Todavía más contenta que ayer, pero mucho más, es por ello que he llamado a esta entrada (TATATACHAAAAN....): "Miércoles aún más glorioso".

                                                 

Os preguntaréis la razón de mi alegría ¿no? pues bien ahí va: ¡POR FIN TENGO COMENTARIOS! ¡ALGUIEN ME LEEE! ¡YUPIIIII! Muchísimas gracias de verdad, no sabéis la ilusión que me hace no estar sola en esto. Gracias.

                                                      

Pues dicho esto, ¿Qué tal ha ido el día? El mío ha sido bastante bueno, he vuelto a cumplir la dieta sin pasarme. Ya llevo 5 días contando hoy, estoy hecha una campeona.

Os dejo mi menú de hoy:

- Desayuno: Idem.

- Media mañana: Café con leche desnatada y sacarina. Cuatro rodajas de piña en su jugo.

- Comida: Ensalada de canónigos, cebolla y alcachofas (de esas de bote, que ya vienen aliñadas); y de segundo guisantes con taquitos de jamón y huevo. De postre una raja de melón.

- Merienda: Una rebanada de pan Bimbo integral con pavo y queso de Burgos.

- Cena: Ensalada que me ha sobrado a mediodía y un tazón de salmorejo con huevo cocido. De postre: Un yogurt desnatado.

 

Tanto ayer como hoy lo que he hecho ha sido comerme el yogurt de postre de la cena, dos horas después de la misma. ¿Por qué lo hago? pues muy sencillo, yo ceno temprano (sobre las nueve o nueve y media) por lo cual, en muchas ocasiones estoy todavía tirada en el sofá viendo una peli o una serie tres horas después. Es en ese momento cuando mi estomago comienza a rugir como si le fuera la vida en ello, vamos que podría protagonizar:

                                                     

Es entonces el momento más duro de la dieta, mi mente empieza a pensar en todo tipo de pecados (y no carnales, os lo aseguro): chocolate, frutos secos, medio sándwich, unas patatitas fritas, un bol de cereales... En esos instantes, respiro hondo, me levanto del sofá y me dirijo a por el yogurt que no me he comido de postre en la cena. A mi la verdad, los yogures no me hacen mucha gracia, pero cuando tengo mono de dulce y los pillo a esas horas, me saben a gloria bendita.

 

En cuanto al ejercicio, igualito que ayer. Media hora de andar antes de ir a currar. Una hora de paseo y 45 minutos de ejercicios (la rutina que os comenté ayer) por la tarde. He de decir que hoy tengo agujetas del ejercicio de ayer... Madre mía soy penosa...

                                                  

 

Y por último, pero no menos importante, mi puesta a punto de cara al otoño. Hoy tocaba peeling corporal. Os cuento como lo he hecho:

Yo al principio me compraba diferentes exfoliantes para el cuerpo hasta que leí lo siguiente en una revista: Si mezclas tu body milk con azúcar y lo extiendes y frotas por todo el cuerpo, tendrás una exfoliante de lo más efectiva.

Dicho y hecho. Lo probé y me encantó. Si que es verdad que hoy en día las cremas exfoliantes no cuestan mucho (la de Mercadona, por ejemplo, 2,5 euros), pero más barato sale realizando esta mezcla. Además la piel te queda genial. Probadlo y me contáis...

Nota importante: No te lo hagas en la piel del pecho, pues esta es demasiado sensible y podría ser perjudicial... En las tetucas debemos hacer un peeling más suave...

Otra nota importante: Es importante realizarte un peeling al menos una vez a la semana para eliminar las células muertas. De esta forma el resto de cremas que nos apliquemos (véase reafirmante, hidratantes, anticelulíticas, etc.) penetrarán mejor en nuestra piel

 

Y nada más, me despido dando, otra vez, las gracias por los comentarios.

Lo dicho. Atentamente:

 

Griselda.